Las 10 técnicas de motivación laboral indispensables para fomentar la productividad
La motivación laboral es un ámbito psicológico que muchas empresas todavía deben trabajar. Se dice que más de la mitad de las personas consideran el trabajo como una obligación y es una actividad que les causa apatía.
Sin embargo, desde los departamentos de Recursos Humanos de muchas empresas han empezado a trabajar el factor felicidad dentro de sus equipos. Se ha dado cuenta de que un trabajador motivado tiene un incremento notable en la producción. Debido a esta relación directa entre motivación y productividad, es una prioridad para las empresas poner en marcha técnicas de motivación que permitan el crecimiento profesional de los trabajadores y de la compañía. Así pues, la motivación es vital para extraer el máximo partido de los trabajadores y fomentar una cultura cooperativa.
¿Qué es la motivación laboral?
Desde un punto de vista intrínseco, la motivación laboral es el deseo, voluntad o fuerza vital que impulsa a un individuo (en este caso, un trabajador) a esforzarse en cumplir diversas tareas en el trabajo para lograr una meta, un objetivo o una finalidad.
En cambio, desde una perspectiva extrínseca y, por tanto, empresarial, la motivación laboral es la capacidad que tiene una empresa para mantener la implicación o el compromiso de sus trabajadores para mantener o mejorar su rendimiento mediante incentivos. De esta forma, se consigue los propósitos empresariales fijados por la compañía.
Beneficios de aplicar técnicas de motivación laboral
A continuación, procederemos a nombrar algunos de los beneficios de aplicar técnicas de motivación laboral:
- Mejora el ambiente laboral: Un ambiente agradable y un buen clima laboral son esenciales para fomentar la participación y el compañerismo de la plantilla.
- Rendimiento óptimo: Los trabajadores tienen energía para trabajar más, ejecutar proyectos de mayor calidad y estar más concentrados para llevar a cabo las tareas diarias. La consecuencia directa que tiene ese comportamiento es el aumento de la productividad y el rendimiento de la empresa.
- Estimula la proactividad: El personal siente que posee el control activo y decide qué hacer en todo momento para anticiparse a los eventos.
- Fomenta el compromiso: El compromiso es uno de los factores más importantes de una empresa. Si los trabajadores están comprometidos con su trabajo y se identifican con los valores de la empresa, se incrementa su satisfacción y, por tanto, su productividad.
- Potencia el trabajo en equipo. Tener un equipo comprometido comporta que los trabajadores estén más motivados en la consecución de los objetivos. No se limitan solamente a ejecutar su trabajo, sino que controlan todo el proceso en el que se aplica este trabajo. Como resultado, están en contacto con otros compañeros, del mismo o diferente departamento, para cumplir la finalidad.
- Permite la realización personal en el puesto de trabajo.
- Contribuye al éxito de la empresa. La empresa conserva el bienestar y la salud del personal dando incentivos, que mejoran la calidad de vida. De esta forma disminuye el número de trabajadores enfermos o las bajas por enfermedad, y también descienden los niveles de absentismo.
- Permite retener el talento. Permanecen en la empresa los trabajadores talentosos y con mayor experiencia, y se reducen los costes de contratación y formación de nuevo personal.
10 técnicas de motivación laboral indispensables
Como ya hemos explicado en el primer apartado, los trabajadores deben automotivarse (motivación intrínseca), pero la actitud que la empresa adopta para motivar a la plantilla (motivación extrínseca) también es vital para mantener la satisfacción y permanencia del personal. Es más, la motivación en el trabajo está estrechamente relacionada con la eficiencia y la productividad.
Existen numerosas técnicas para fomentar la motivación en una empresa. A continuación, únicamente enumeraremos diez que consideramos que son las más relevantes:
1. Adecuar el ambiente y las instalaciones
Se debe propiciar un entorno laboral agradable y acogedor, lo que se puede conseguir, por ejemplo, con oficinas amplias, buena iluminación y temperatura adecuada. En cuanto a la iluminación, existe la técnica HCL (Human Centric Lighting). HCL es la iluminación centrada en el ser humano y consiste en imitar la luz natural para impulsar sus funciones biológicas: afecta a las hormonas, la atención, el estado de ánimo y también determina el reloj corporal.
También existen otras alternativas como crear zonas de descanso, espacios abiertos y zonas de juegos.
2. Ofrecer flexibilidad horaria
Una de las técnicas de motivación laboral más actual es no ser tan estricto con el horario de entrada y salida. Se propondrán horarios alternativos que se adapten a las necesidades de cada trabajador. De esta forma, cargan con menos presión, sienten que controlan mejor el tiempo y pueden conciliar la vida personal y familiar.
Para que los horarios sean más flexibles, pueden aplicarse diversas estrategias. Se puede disminuir el tiempo destinado a las comidas para acabar la jornada más bien, como también puede reducirse la jornada a cuatro días a la semana (de lunes a jueves) para tener los viernes libres. La estrategia de reducir la jornada a 4 días la aplican empresas como Desigual, Telefónica, entre otras.
3. Aplicar una política de incentivos
La forma más tradicional de motivar desde el inicio del tiempo. Son una compensación que reciben los trabajadores por haber alcanzado sus objetivos. Incluso por colaboraciones en los proyectos. Los incentivos pueden ser monetarios (comisiones, primas por objetivos, bonificaciones) o no monetarios (viajes pagados, regalos, teletrabajo).
4. Habilitar una zona de ocio
No todo consiste en trabajar. También debe haber ratos para el ocio, no solamente en lugares específicos, sino también en los que están destinados al trabajo. Además, debe haber una zona concreta para el descanso o el desayuno.
Habilitar una zona de ocio ayudará a aumentar las relaciones interpersonales y el espíritu del equipo. Es importante definir una estructura para que estas zonas de ocio no pasen a ser un pasatiempo demasiado común para los trabajadores.
Esta es una de las técnicas de motivación laboral que refuerza el trabajo en equipo, la concentración, el esfuerzo, el compromiso, entre otros, lo que contribuye a una jornada laboral más amena y productiva.
5. Incrementar la autonomía como signo de confianza
El empresario o jefes de departamento deben depositar confianza en los trabajadores. Necesitan el apoyo de la empresa, que debe dejar que expongan sus ideas y proyectos con libertad.
La autonomía también implica delegar responsabilidades al personal y dejar cierto margen de error. Así pues, los trabajadores se sienten menos controlados por las supervisiones y tienen mayor libertad para organizar las tareas cotidianas.
6. Comunicar y reconocer los logros personales
Una de las principales técnicas de motivación laboral es la comunicación. Hay que valorar y elogiar el esfuerzo de los trabajadores, así como reconocer y premiar los objetivos que han alcanzado. Se puede hacer de muchas formas. Por ejemplo, con una serie de beneficios, como premios, ascensos, pagas extra, días o tardes libres o regalos. Estas acciones aumentan la autoestima, el entusiasmo y los ánimos de la plantilla.
7. Fomentar el trabajo en equipo
La empresa debe fomentar el trabajo colaborativo para que los trabajadores salgan de su zona de confort. Es aconsejable que conozcan a compañeros de otras áreas o departamentos. De esta forma, intercambian ideas que pueden ser útiles para aplicar a sus proyectos o a las rutinas. A mayor colaboración, mayor entendimiento de las diferentes áreas de la empresa y, por tanto, mayor solidaridad a la hora de trabajar.
8. Apostar por la Salud
La empresa debe preocuparse por la salud (tanto física como psíquica) y por el bienestar de sus trabajadores. Para ello debe fomentar hábitos saludables (alimentarios, deportivos, pongamos por caso) y disponer de instalaciones, herramientas y mobiliario adecuados para cada tarea. Si no hubiera espacio para adecuar las instalaciones, siempre se pueden ofrecer cupones de descuento por gimnasios.
Otro punto fuerte por el que muchas empresas optan es el de ofrecer seguros médicos.
9. Promoción laboral y formación
Los trabajadores deben tener la oportunidad de escalar posiciones dentro del organigrama de la empresa y, por tanto, percibir un sueldo más alto. Por otra parte, la compañía debe convocar a formaciones (cursos, por ejemplo) para favorecer el crecimiento laboral de la plantilla.
De esta forma, el trabajador se siente una parte esencial de la compañía. También cabe remarcar que las formaciones pueden ser un arma de doble hoja. Principalmente, por si se aplican en horario laboral o fuera del mismo. Habrá que saber muy bien los intereses y obligaciones de tus trabajadores para poder acotar la mejor opción.
10. Condiciones laborales motivadoras
El salario que perciben los trabajadores debe ser justo y digno. Dicho de otra forma, debe ser un salario con el que se sientan valorados. También se pueden añadir remuneraciones en especies como pueden ser tickets para restaurantes, tickets para la guardería, para la gasolina… Son también buenas opciones para ampliar la motivación en la empresa.