Fiscalidad
23 de Octubre de 2017

Compliance Fiscal

Compliance Fiscal

En el lento proceso de las sociedades para no repetir o, como mínimo, a poner dificultades a la repetición de errores del pasado, los estados y organismos internacionales van imponiendo criterios y normas que pretenden llevarnos hacia sociedades más modernas y justas. Dentro de este marco, ya hace años que desde EEUU nos llegó la llamada Compliance Fiscal que, poco a poco, se va abriendo paso en nuestro país.

Ya hace un tiempo que el término Compliance Fiscal va apareciendo más en las conversaciones entre directivos de empresas medianas. Hasta ahora, sólo las grandes empresas (las cotizadas) tienen la obligación legal y formal de tener una compliance implantada formal y públicamente.

¿Qué es la Compliance Fiscal?

Lo podríamos definir como los recursos que la empresa destina a cumplir la normativa fiscal interna y externa, y las responsabilidades que genera. La empresa necesita cumplir la normativa fiscal externa, las leyes e impuestos fiscales, y su repercusión económica y penal. Pero también debe decidir internamente qué política fiscal interna seguirá; como por ejemplo en sus precios internos, la gestión de filiales y su interrelación o como implantará el cumplimiento de las leyes fiscales dentro de sus procesos administrativos y de gestión. Finalmente, debe identificar las responsabilidades dentro de la empresa para su cumplimiento. La Compliance Fiscal nos servirá para presentar la empresa frente a terceros, de la administración y, sobre todo, de los socios, como una entidad responsable socialmente en sus obligaciones tributarias, así como segura de tener bajo control riesgos tan importantes para cualquier empresa como son los fiscales y contables.

En los últimos años la normativa ya ha ido incorporando elementos que van obligando a las empresas a tener la Compliance fiscal muy en cuenta. La Ley de Prevención de Blanqueo de Capitales, la modificación y nuevas interpretaciones del Código Penal que regula también la responsabilidad penal de las personas jurídicas o entidades (con el caso bien conocido del FC Barcelona), o la modificación de la Ley de Sociedades de capital repartiendo más claramente responsabilidades entre la Junta de accionistas y los administradores en temas que han sido muy polémicos tales como la retribución de los directivos, son una buena muestra. También lo es la persecución de las llamadas BEPS (en inglés Base Erosion and Profit Shifting), responsables anualmente de la deslocalización de ganancias por parte de las multinacionales, que supone una menor recaudación en los estados de entre un 4 y un 10% del impuesto sobre sociedades.

La Compliance Fiscal quiere generar en la empresa una cultura fiscal que permita a la misma alcanzar varios objetivos:

  • Controlar los riesgos fiscales de la empresa, tanto por las responsabilidades económicas que puedan derivarse como de las penales (recordemos que defraudar aunque sólo sea por negligencia, sin mala fe, más de 120.000 € por impuesto y año se considera delito, con un castigo no sólo económico sino penal para el responsable).
  • Mantener la confianza del mercado y de los propietarios de la empresa de que las cosas se están haciendo bien, con control de los riesgos y de manera eficiente.
  • Tener controlada la reputación fiscal de las empresas, el prestigio social. Salir en la portada de un periódico, en la prensa o en las redes sociales por un tema fiscal puede traer problemas con la visión por parte de los consumidores de nuestra empresa, afectar a nuestras ventas y posicionamiento e incluso a nuestra marca.
  • Asegurar la transparencia necesaria en la empresa con todo su entorno.

Si bien su aplicación no es obligatoria para todas las empresas, es cierto que los objetivos que pretende son objetivos que todas las empresas deben tener muy en cuenta y buscar en su día a día. Una estrategia fiscal integrada dentro de la operativa normal de la empresa y dentro de su modelo de negocio, bien clara y transparente, nos hará evitar unos riesgos presentes en nuestra sociedad desde hace ya tiempo.

Si desea más información o asesoramiento no dude en ponerse en contacto con nosotros en [email protected] o 93 872 32 22.

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Francesc Xavier Casé Calsina
Responsable de áreaFrancesc Xavier Casé Calsina

Un innato espíritu de liderazgo avala la experiencia de nuestro ejecutivo. Es un líder en implementación de estrategias y soluciones profesionales. Un asesor nato para cualquier tipo de negocio. Tiene una amplia experiencia en prestar servicios de consultoría profesional. En su recorrido, ha prestado asesoramiento a todo tipo de empresas de distintos sectores, ofreciendo propuestas novedosas y resultados excelentes. Su veteranía le da una gran visión de negocio y de posibles oportunidades. Es un especialista en asesoramiento fiscal, financiero y gestión de personas.